Desarrollo de herramientas y estrategias para una ganadería sostenible en la región NOA

Código:
2023-PE-L01-I057
Impacto:
Económico
Plazo:
48 Meses
Instrumento:
Proyecto estructural (Cartera 2023)
Título:
Desarrollo de herramientas y estrategias para una ganadería sostenible en la región NOA
Centro o programa involucrado:
Centro Regional Catamarca-La Rioja; Centro Regional Salta-Jujuy; Centro Regional Tucumán-Santiago del Estero

Objetivo General

Fortalecer la eficiencia y estabilidad de los sistemas ganaderos de la región NOA en un marco de desarrollo sostenible.

Resumen Ejecutivo

La ganadería en el Noroeste Argentino (NOA) es una de las principales actividades económicas e involucra diferentes especies (bovinos, caprinos, ovinos, porcinos y camélidos) y escalas productivas, desde grandes empresas hasta pequeños productores familiares. La presencia de un gradiente ambiental y ecológico amplio permite el desarrollo productivo de estas especies pecuarias. Además, cumple funciones socioeconómicas relevantes, permite la reproducción social de miles de familias y la generación de puestos de trabajo, manteniendo el tejido económico en áreas rurales. No obstante su importancia, la ganadería presenta problemas, entre los cuales se citan: índices por debajo de la media nacional; volúmenes de comercialización que no llegan a cubrir la demanda local; poca gestión de los recursos forrajeros; insuficientes diagnósticos sanitarios e información socioeconómica y ambiental, entre otros. El NOA, ante un contexto mundial de aumento de demanda de alimentos, presenta potencialidades de crecimiento y desarrollo, sin dejar de lado la fragilidad, variabilidad y la potencialidad de sus ambientes. En este contexto, el proyecto busca fortalecer la eficiencia y estabilidad de los sistemas ganaderos de la región NOA en un marco de desarrollo sostenible. Se propone abordar 4 objetivos específicos tendientes a: I) alimentación, nutrición y manejo; II) sanidad, reproducción y genética; III) sistemas, prácticas, tecnologías y ambiente; y IV) comunicación, redes, vinculación tecnológica y difusión. Para lograrlos, se plantea integrar los componentes estratégicos del PEI 2015-2030, contemplando y potenciando las características regionales y locales. Se busca ampliar la frontera del conocimiento mediante la aplicación de diferentes herramientas, principalmente ligadas a la experimentación adaptativa en campos de productores. En relación a la gestión operativa se propone conformar y/o consolidar redes y equipos interdisciplinarios con programas y Centros de Investigación (Institutos) para afianzar la articulación interna del proyecto y potenciar las relaciones con los distintos actores que conforman los sistemas productivos ganaderos del NOA. A partir del proyecto se espera obtener: estrategias superadoras en alimentación, nutrición y manejo; planes sanitarios y reproductivos para el NOA; aumento de los índices productivos; efectos ambientales negativos reducidos; tecnologías validadas; información regional actualizada, sistematizada y disponible; publicaciones; articulaciones interinstitucionales y actores del sector ganadero capacitados.

Descripción de Problemas y Oportunidades

El incremento en la producción de carne se presenta como un objetivo permanente del estado nacional y plantea un desafío para el desarrollo de tecnologías para la ganadería en todos los territorios (PEAA, 2010). No obstante, la actividad ganadera bovina se encuentra en un desequilibrio económico y ambiental con un estancamiento desde hace décadas. Entre los índices productivos de relevancia, los datos históricos muestran que el país mantiene una baja eficiencia de procreo (55 a 68 %) y una tasa de destete de 61%, siendo este un parámetro a mejorar (Alvarez, 2022). En pequeños rumiantes, la fertilidad no supera el 50% anual, asociada a las limitaciones propias de los ambientes donde estos se desarrollan. La aplicación de tecnologías de procesos se presenta como la gran oportunidad para aumentar esos índices. El crecimiento productivo debe focalizarse en sistemas más eficientes y la generación de tecnologías debe responder a una diversidad de condiciones ambientales y socioeconómicas. La alimentación juega un rol importante ya que es el principal factor que limita la productividad de los rodeos y majadas, así como la sanidad y la eficiencia reproductiva. Las estrategias de alimentación se tornan más exigentes en utilizar principios fisiológicos y nutricionales, a los fines de eficientizar los procesos de producción, reducir los costos, las emisiones GEI y la huella de carbono (Moyer et al., 2020). Al mismo tiempo, es evidente un deterioro de los recursos forrajeros evidenciando un aumento de los indicadores de degradación, como el incremento de la arbustización, aumento de la superficie de suelo descubierto y pérdida de productividad de pasturas cultivadas y vegetación nativa (Gaitán et al., 2021). Ante estos procesos, Oliva (2019) sostiene que la producción en pastizales naturales debe estar ligada a los sellos de calidad ambiental relacionados con la biodiversidad y los servicios de regulación y soporte. Por ello, resulta central monitorear el efecto de la ganadería sobre la diversidad florística, la productividad, la cobertura, la infiltración, la provisión de agua y la fijación de CO2 (Kurtz et al., 2020). Otro aspecto de relevancia es el referido a la salud animal y la internalización del enfoque de “una salud” en el accionar institucional (PMP 2021-2025), los cuales pueden ser reconocidos como parte de los pilares que componen una gestión integrada para lograr sistemas más eficientes. Los problemas sanitarios afectan la producción, generan restricciones de comercialización e impactan en la salud pública. A esto, se le suman problemáticas como la aparición del fenómeno de resistencia antihelmíntico/antimicrobiano que incrementan su impacto y son una limitante para la formulación de estrategias de control (Lanusse et al., 2018; Lillehoj et al., 2018). Por lo tanto, es imprescindible información que permita estimar objetivamente los costos de producción y el planteo de estrategias de control sustentables y eficientes. La gran heterogeneidad de condiciones ambientales establece la existencia de diversos sistemas de producción ganadera, que están determinados por el nivel, tipo y calidad de recursos sociales, ambientales, productivos y económicos. Según la FAO (2007), los sistemas de producción animal están evolucionando continuamente. Estas dinámicas resaltan la necesidad de contar con información actualizada para la gestión y toma de decisiones. Numerosos trabajos, con distintas herramientas metodológicas (Contreras et. al., 2016; Saldaño, 2016; Suarez et al., 2020; González et. al, 2021) aportaron a la temática. Una cuestión de relevancia relacionada al proceso productivo, es que estos deben tender hacia la sustentabilidad, procurando la resiliencia a factores externos y promoviendo la soberanía local (Castro et al., 2021). El principal desafío es que los mercados valoricen su racionalidad ecológica, los servicios económicos y sociales de estos modelos productivos (Giordini et al. 2022). Los atributos de calidad, la emisión de GEI, el manejo ético de los animales, la trazabilidad de los productos, la adhesión a los ODS y otros aspectos de contaminación ambiental serán cada vez más relevantes (Alvarez, 2022).

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